Del 8 al 14 de noviembre de 2021 se conmemora la Semana de Sensibilización sobre el Consumo de Azúcar. Este año, el lema de la iniciativa es «El lado amargo de las bebidas dulces». ¿Por qué se conmemora y cómo influye el azúcar en la salud?
Se ha estudiado que un consumo de azúcares trae diversas consecuencias en la salud de las personas.
La alimentación con exceso de azúcares contribuye a un incremento en el peso corporal (tanto en adultos como en niños), se relaciona con mayor aparición de caries dentales (1) y se asocia a alteraciones en la utilización de la glucosa por el organismo, lo que además es predictor de la aparición de diabetes.
El consumo de azúcar se asocia con riesgo elevado de diabetes tipo 2, enfermedad cardiovascular y exceso de peso.
La recomendación de la Organización Mundial para la Salud (OMS) sobre el consumo de azúcar es que su aporte energético no supere el 10% de las calorías del día. Para dar un ejemplo: en una dieta de 2000 calorías/día, el 10% de la energía corresponde a 50 gramos de azúcar. Esto equivale a no más de 10 cucharaditas (de tamaño té) de azúcar. Esta cantidad sería el máximo de la recomendación diaria. Los niños tienen menos requerimientos de energía. Al observar la recomendación de OMS, en un escolar podría ser entre 6 y 8 cucharaditas para todo el día.
En la imagen siguiente es posible visualizar la cantidad de cucharaditas de azúcar que aporta cada producto, que puede ser de consumo frecuente. Varios de esos productos son consumidos por niños también. Esta referencia es de utilidad para registrar que fácilmente en el día podemos tener exceso calórico, de azúcares y en un tiempo se materializará en exceso de peso.
Fuente: Guía alimentaria para la población uruguaya. MSP, 2016.
¿Hay varios azúcares?
Hay distintas denominaciones o fuentes de azúcar, pero es importante tener claro que el efecto sobre el organismo es similar en todos los casos. Al buscar en un envase, en la lista de ingredientes, puede aparecer como “azúcar”, u otras denominaciones.
Por ejemplo: sacarosa, glucosa, fructosa, dextrosa, miel, jarabe de maíz, de agave, otros jarabes usados para endulzar, melaza, azúcar moreno, azúcar mascabo, azúcar de coco, azúcar invertido, jugo o puré de frutas concentrado, azúcar o jarabe de dátiles, etc.
Cada ingrediente mencionado tendrá sus características culinarias propias y será mas adecuado para lograr un mejor producto final, de todas maneras las calorías y el efecto metabólico es similar.
“El lado amargo de las bebidas dulces”
Esta Semana de Sensibilización sobre el Consumo de Azúcar, liderada por la WASSH, está dedicada a las bebidas dulces. El objetivo es informar, crear conciencia, contenidos, y promover acciones sobre el elevado consumo de bebidas dulces y otros productos azucarados.
Las bebidas azucaradas (gaseosas, jugos, aguas saborizadas) aportan buena parte del azúcar que ingerimos. Esto implica un alto contenido energético (calorías). En general se beben rápidamente sin aportar otros elementos nutritivos. Estas bebidas brindan solamente “calorías vacías”, que no dan saciedad, y que desafían al metabolismo a trabajar para retornar a los “niveles normales” de glucosa en sangre.
En el esquema siguiente es posible comparar la cantidad de azúcar que contienen bebidas con azúcar más presentes en el mercado.
Fuente: Guía alimentaria para la población uruguaya, MSP 2016
(1) Guideline: Sugars intake for adults and children. Organización Mundial de la Salud, 2015
