En el año 2018 la ONU estableció la fecha del 3 de Junio como el Día Mundial de la Bicicleta.
La bicicleta surgió a mediados del siglo XIX y desde entonces se transformó no solamente en un medio de transporte, sino en una fuente de recreación, una herramienta para realizar actividad física (AF) y para algunas personas en una verdadera pasión.
Su uso aporta tantos beneficios para el cuidado de la salud de las personas y para la protección del medio ambiente, que en algunos países el promover su uso es considerado una necesidad.
Se estima que existen aproximadamente mil millones de bicicletas en todo el mundo, cifra que representa el doble de los automóviles.
Practicar ciclismo a una intensidad moderada representa el consumo de unas 300 a 600 calorías por hora en promedio.
El ciclismo practicado de manera regular ayuda a controlar los factores de riesgo, como la hipertensión arterial, colesterol, diabetes y a mantener o incluso disminuir el peso corporal, así como a reducir el estrés.
En nuestro país se está en un proceso de generación y promoción del uso de ciclovías y bicisendas, con un desarrollo variable en diferentes departamentos y ciudades del Uruguay.
Este tipo de actividad física, como es andar en bicicleta, genera múltiples beneficios en la promoción de salud y en la prevención de diversas enfermedades no transmisibles, en particular las enfermedades cardiovasculares.
Desde la Comisión Honoraria para la Salud Cardiovascular, para celebrar este día, invitamos a aprovechar el tiempo libre del fin de semana del 4 y 5 de Junio para utilizar esta gran herramienta, de forma segura, lúdica, en familia o de forma individual para movernos, dando un paseo al aire libre y disfrutando del placer del contacto con la naturaleza.
En Montevideo hay actualmente varias opciones para el uso de la bicicleta, compartimos enlaces sobre lugares y normativa y consejos para el uso de la IMM: