La actividad física está presente en todos los ámbitos de nuestro día a día.
Los seres humanos estamos diseñados para el movimiento, por lo tanto para incorporar la actividad física en nuestra vida cotidiana debemos “liberar el instinto”.
¡Algunas ideas!
- caminar desde casa al trabajo o el lugar de estudio.
- pasear con nuestras mascotas.
- si utilizamos vehículos motorizados, estacionar lejos o bajar antes y caminar hacia nuestro destino.
- utilizar una bicicleta para trasladarnos o pasear.
- realizar actividades que impliquen movimiento en nuestro tiempo libre.
- realizar actividades domésticas que impliquen moverse, levantar algún peso, arrastrar o empujar objetos.
- bailar en nuestro tiempo libre.
- además incorporar el ejercicio estructurado, ya sea en un gimnasio, club o de forma individual. (uso de aplicaciones para ello son opciones)
- utilizar los espacios públicos donde se puede realizar actividad física. (ejemplo Gimnasios al aire libre, GAL)