Desde 2020 se reconoce al 4 de marzo como el Día Mundial de la Obesidad.  Este año busca fortalecer el compromiso global para actuar juntos en el control de este problema de salud que sigue creciendo en todas las edades y regiones.

Es necesaria la acción de todos para enfrentar efectivamente esta enfermedad, que además es un factor de riesgo para otras enfermedades como diabetes, enfermedad cardiovascular, hipertensión, cáncer.

Se necesita que todos comprendamos que tenemos un rol para desempeñar en este tema. Todos somos necesarios y nos necesitamos para acercarnos a la ambiciosa meta de detener el aumento de la obesidad.  

En esta búsqueda de sensibilizar y crear conciencia, internacionalmente se ha propuesto el lema  #todosnecesitamosdetodos

La respuesta debe ser entre varias disciplinas y diferentes sectores y niveles.  La alimentación saludable y la actividad física son estrategias valiosas para este problema de salud. Entornos saludables, que promuevan y faciliten conductas y estilos de vida protectores de la salud son escenarios que se pueden crear y construir.  En el concepto más amplio de entorno están desde el barrio a la escuela, el lugar de trabajo, las comunicaciones, y el centro en el hogar y la familia.

Desde la Sociedad Uruguaya para el Estudio de la Obesidad se impulsa este Día Mundial, jerarquizando la necesidad de generar conciencia individual y en toda la sociedad, y que se tenga un abordaje científico y respetuoso de esta compleja enfermedad.   #concienciaparatodos.

En la actualidad estamos viviendo concomitantemente varias pandemias, la infección COVID-19 con las enfermedades crónicas, tan presentes en la población, donde la obesidad y sus comorbilidades contribuyen a una mayor probabilidad de internación y susceptibilidad de tener complicaciones con COVID 19.

¿Cómo estamos? Por la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo del 2013, conocemos que el 58.5% de los uruguayos presentan algún grado de exceso de peso, presentando obesidad cerca del 24%. Existe una tendencia de empeoramiento de esta enfermedad con la edad, presentando la mayor prevalencia, 78%, en la franja de 55 a 64 años.

En 2019 se conoció un relevamiento a cargo de ANEP de la situación de los niños de escuelas públicas del país. En él se encontró que 4 de cada 10 niños tienen algún grado de exceso de peso, y de éstos la quinta parte tiene obesidad.

De acuerdo al análisis del consumo de los escolares, a partir de este trabajo, surge como muy preocupante que más de la mitad recibe más calorías de las que necesita, y que consumen en promedio 3 kg de azúcar por mes, entre el azúcar agregado, y en especial a partir de los productos elaborados (jugos, bebidas azucaradas, galletas, alfajores, postres, etc).  (UNICEF, 2021). Esta cantidad de azúcar es más del doble de lo recomendado como máximo para la alimentación de los más chicos.

Los hábitos que el niño o la niña adquiera en la infancia serán la base de su salud y su alimentación para el resto de su vida.

Mensaje desde el corazón

La obesidad puede ser prevenida y debe ser tratada adecuadamente. Como enfermedad crónica, es posible mantenerla en un control adecuado, pero requiere seguimiento, capacitación y apoyo.

El exceso de peso presenta un factor de riesgo para la salud cardiovascular. Es más probable tener diabetes, hipertensión y que las cifras de colesterol se encuentren alteradas.

También se sabe que reducir entre un 5 y un 10% del peso, acompañándolo de mejor alimentación y movimiento tiene, en general, un impacto positivo en el control de estas condiciones, brindando bienestar, y reduciendo el riesgo de enfermedad cardiovascular.

La obesidad como una enfermedad, buscar ayuda.

Apoyar a la persona con exceso de peso, enfrentar el estigma que trae el sobrepeso, y colaborar para que reciba un tratamiento adecuado.

El equipo de salud debe capacitarse continuamente y brindar tratamiento y acompañamiento a la persona obesa y su familia.

Desde su lugar de trabajo fortalecer y favorecer programas que aborden esta enfermedad.

Más info:

http://cardiosalud.org/factores-de-riesgo/obesidad/

https://www.facebook.com/sociedadSUEO/

Los hábitos que el niño o la niña adquiera en la infancia serán la base de su salud y su alimentación para el resto de su vida.

Una bebida gaseosa azucarada de 600ml tiene 12 ctas de azúcar.  Esto supera la recomendación máxima de azúcar para todo un día. (Guía alimentaria. MSP, 2016)

Incorpora verduras y frutas en todas tus comidas. Te ayudará a sentirte bien y a mantener un peso saludable. (Guía alimentaria. MSP, 2016)

Preferí el agua a otras bebidas. No esperes a tener sed. Recuerda llevar tu botella de agua fresca o tenerla a la vista en tu lugar de trabajo o estudio.

Un estilo de vida activo tiene grandes beneficios para prevenir la obesidad.

Es una enfermedad crónica, busca ayuda en tu equipo de salud.